“A lo largo de los días vamos viendo qué es lo que está sucediendo. Nosotros, si bien el lunes veíamos que nos acercaban listas nuevas de precios y que con esas listas nos decían que eran el nuevo valor de lo que íbamos a comprar, hoy, ya con el correr de los días, nos vamos dando cuenta de que quizás hasta haya proveedores que lo estén usando como un argumento de venta, y no porque realmente quieran cambiar los precios. Esa es la conclusión a la que llegamos.”
“Como típicamente en el pasado, en períodos inflacionarios, el argumento era que tengo un cambio de lista, que pasen el pedido y cubrirse, hemos llegado a la conclusión de que muchos están utilizándolo más como un argumento de venta por caída de ventas, más que por un aumento genuino y real.”
“El consumo ha cambiado, y yo te dibujo cinco escenarios distintos: un escenario nacional y otro de consumidor. De los tres escenarios nacionales, tenés el sur argentino, que ha explotado el consumo, incluso cuesta mucho conseguir mano de obra. Después está el norte argentino, donde el consumo no está muy bien. En el centro del país, el consumo va muy despacio, desde mayo o junio del año pasado se viene recuperando. Ahora también tenemos dos escenarios completamente distintos en el tema del poder adquisitivo de la gente: el asalariado que está dentro del sistema, que son más o menos 9 millones de personas en blanco, con paritarias que se cumplen, podemos discutir si alguna logró más que otra, pero despacito el salario de ese sector se está recuperando. Pero no sucede lo mismo con las 11 millones de personas que están en negro, que son trabajadores informales. Ahí es donde realmente está la verdadera crisis nacional, porque son salarios que están entre 30 y 40 puntos por debajo de la inflación de los últimos 15 meses.”
“El hábito de consumo fue cambiando mucho. Por ejemplo, la persona que consumía atún ahora consume caballa, o una persona que antes le cambiaba el pañal tres veces por día a su bebé, ahora se lo cambia dos veces. Si antes compraban alimento para bebé, ahora están comprando sémolas o maicena. Son categorías que se ven, como fueron cambiando los hábitos de consumo por una cuestión lógica de economía familiar.”