"La embajada y la detención o secuestro del gendarme argentino están ligadas intrínsecamente porque se están viendo señales inquietantes del régimen, de que podrían estar frente a una suerte de ataque paranoico por dentro, viendo conspiraciones que no existen, o están preparando algo haciéndose de un capital de personas con las que podrían negociar algo."
"Se vislumbra en la política y sociedad venezolana que algo va a ocurrir en las primeras semanas de enero. Edmundo González Urrutia, que está en España, dice que va a estar en Venezuela el 10 de enero y que va a asumir como presidente."
"Ante una situación desbordante para el régimen, el régimen puede tener rehenes para negociarlos y obtener algo a cambio, como detener la conspiración en marcha o canjearlos por un salvoconducto para salir del país."
"Además del gendarme argentino, hay como detenidos 6 o 7 norteamericanos, hay también peruanos y uruguayos. Hay muchas personas que ha ido acumulando el régimen, por eso una de las hipótesis es el intento de hacer en sentido inverso lo que se hizo con Alex Saab, que fue liberado por EE.UU, a cambio de que el régimen de Nicolás Maduro libere a 10 ciudadanos estadounidense que tenía en cárceles venezolanas."
"Lo que está claro es que esta tensión es creciente y ya es sumamente peligroso."