“El discurso de la presidente, tuvo dos tramos, el primero fue alterado, fue un repaso estadístico de los datos que quiere mostrar el gobierno y después se entro en un plano innecesario en el que se hizo solo un discurso para sus seguidores generando tensión”.

“La presidente arrancó con un discurso diciendo lo importante de construir y trabajar sobre la base del amor y después trató de estúpidos a toda la oposición y la Corte estando presente”.

“Fue bastante inesperado el tono poco feliz de la presidenta”.

“Yo tenía mis deseos que en su último discurso, más ecuánime, que deje alguna puerta abierta al congreso para que acerque algunas medidas en tono a la inseguridad”. “La presidenta pudo haber dando el ejemplo y haber buscado consenso y coincidencias al ejercer el máximo cargo del país”. “Fue un discurso con intencionalidad electoral, dando señales para un lado y para el otro”.

“Al ser el último discurso de todo un periodo de gobierno pudo haber hecho un balance general de los temas más globales o un cierre, pero se metió en la pequeñes de dar una señal electoral a favor de alguien o en todo caso de atacar a sectores”.

“La presidenta arrancó diciendo la importancia de que tengamos independencia del poder judicial y después siendo presidenta hizo varias referencias a la Justicia y eso es interferencia”.

“Martin Insaurralde no se fue de ningún lado siempre estuvo ahí”.

“Dentro del Frente Renovador no buscamos romper lo que esté bien. Creemos que los problemas que angustian como la inflación, la educación y la inseguridad hay que resolverlos y no esconderlos”.