“Si nosotros hablamos de lo que quiere decir default, claramente que no estamos porque es cuando un país no puede pagar, como pasó en 2001 que la deuda supera y no se puede pagar”.
“Desde el punto de vista del que tiene que cobrar, no ha cobrado y del que tiene que pagar, ha pagado. Seguramente, no creo que haya antecedentes en que podamos mirarnos ante esta situación. Un fallo judicial lo impide, eso es raro”.
“Vamos a ver cuáles son las herramientas que el Gobierno dispone. Probablemente haya otras instancias. Se ha hablado de la posibilidad de cambiar el domicilio de pago. Ofrecerle a los acreedores de Argentina una sede que los pongo al resguardo de este tipo de decisiones parciales como las que ha tomado este juez”.
“No sé si a la Argentina la atacan por su punto de vista político, lo que yo no tengo duda es que hay muchísimos intereses en que toda la deuda Argentina entre en una situación de inestabilidad. Es difícil ponerle nombre y apellido. Hay muchos intereses de que a la Argentina no le vaya bien porque si alguien toma decisiones autónomas con éxito para algunos no es bueno”.
“No me sorprende que Daniel Pollack haya dicho que Argentina está en un inminente default. Está claro que este juez ha actuado con parcialidad notoria. Quiere instalar algo inocente de que una declaración por plata se cae por una negociación”.
“La Argentina viene saliendo de una situación grave que es la que tenía en 2001 y ha trabajado profundamente para salir de eso y estoy convencido que no debería haber ninguna cosa que nos lleve a hipotecar todo lo que hemos solucionado”.
“Primero, yo nunca planteé que tenía intenciones de ser presidente de la AFA, a veces mi nombre aparece vinculado porque hay dirigentes que me nombran entre personas que tienen condiciones para ocupar el cargo de Julio Grondona. Siempre me mantuve en un todo prudente cuando se habló de este tema. Si me gustaría ocuparlo, tendría que estar buscando obtenerlo porque uno siempre trata de lograr lo que le gustaría, pero yo no estoy pujando por eso”.