Por suerte muchos docentes están mostrando un compromiso y también que el paro era político. Se dio porque un gremio como UTE, a pesar de haber llegado a un acuerdo salarial, fue al paro. Fue claramente una disidencia política. Cuando decimos que no politicemos la educación no nos lleve a que no haya clase.
Cuando uno ve que las escuelas privadas tienen clases igual, eso marca la diferencia. Espero que, retomadas las clases hoy, podamos cumplir los 190 días, como lo hicimos los últimos dos años. Obviamente cuando hay reclamos de trabajo pero aquí no hay nada de eso.
El trabajo que estamos haciendo tiene que ver con una nueva forma de construir y sabemos que eso puede generar dudas. La semana que viene inauguramos la primera escuela en Ciudad Oculta, en Lugano.
No es un container, es una mitad de un aula que se encastra, como un mecano. En algunos casos, en términos de temperatura es mejor que algunas de las aulas que tenemos hoy. Estoy convencido de que este cambio cultural va a ganar espacio. Reconocemos que hemos hecho mucho: cuando llegamos no podíamos garantizar la educación de los chicos de 5 años. Ahora ya estamos por los chicos de 3.
No hay que ir de un lado para el otro. La política abandonó a los docentes. Ningún político habla de la educación en sus campañas. La mitad de los chicos no termina el secundario y de esa mitad, la mitad puede comprender textos. No es casual que la política haya abandonado a los jóvenes. Tenemos que volver a esa Argentina, donde la escuela era el centro. En algún momento la sacamos: volvamos a ponerla.
Le hemos propuesto a la Nación sacarles el impuesto a las ganancias a los maestros. Es una tontería cobrarle ese impuesto. Hace tres años lo vengo planteando y lo volví a plantearlo ahora. Faltan vocaciones de maestros.
Cuando organizamos capacitaciones para docentes, tienen mucha presencia. Hacemos un intercambio con docentes de otros países para que vean cómo es acá. Lo que tenemos que hacer nosotros como Gobierno es facilitar eso. Uno encuentra mucha vocación.
A todos los docentes les hemos dado una computadora con internet gratuito y vamos a hacerlo con los de jardín. Es muy importante trabajar para que los niños puedan tener una. Cuando uno le da una computadora a un nene de 6 años, también está igualando.
Sería necio decir que no cometimos errores con el sistema online. Hay que dar la cara y corregir. Estamos convencidos de que funcionó. Se anoto más gente, se trasparentó el problema de la inscripción y se armó un mapa muy preciso de dónde hacían falta escuelas.
Hubo errores, sí. No podemos dejar de reconocer que cada familia que tuvo un problema con la inscripción, necesita una solución. Quiero que sepan que me importa atenderlos personalmente. Mi teléfono es 1550025656.
Nueve de cada diez familia tienen las escuelas que eligieron, pero nos falta trabajar en esa familia que no. Si Mauricio no creyera en la escuela pública, no hubiera invertido en todas las computadoras. La mala política en la educación no está reflejada en la escuela. Hay muchos prejuicios con Macri. En la Ciudad, hay desconocimiento.